Recuerdo un año, cantando villancicos en la sala de demencia de un centro de mayores de mi ciudad. Mientras cantábamos -Harking the Harold Angels- miré a través de la sala y vi todos los ojos fijos en nosotros e increíblemente todas las bocas cantando con nosotros. Estos ancianos, que habían olvidado sus casas, sus nombres, las caras de sus hijos, cantaban TODAS LAS PALABRAS DE TODAS LAS CANCIONES. ¿Qué tiene la música que ni siquiera las personas con graves problemas de memoria pueden olvidarla?
Si tiene algún tipo de relación con personas con necesidades especiales, probablemente se haya dado cuenta de que la música desempeña un papel importante en sus vidas: canciones de Disney en el coche, auriculares con música clásica mientras se mueven entre la multitud, incluso la abuela con demencia tiene una canción favorita de su infancia que se oye tararear.
La música puede ser una poderosa herramienta para las personas con dificultades intelectuales. Veamos 5.
Estado de ánimo
En primer lugar, la música puede influir positivamente en el estado de ánimo. Se ha demostrado que reduce el estrés, la ansiedad y la depresión, e incluso puede mejorar el bienestar general. Esto se debe a que la música puede estimular la liberación de endorfinas, que son sustancias químicas del cerebro asociadas a sentimientos de placer y felicidad. Algunos ritmos pueden energizar y otros calmar. La música nos permite abstraernos de nuestras circunstancias externas y dejarnos envolver por el estado de ánimo que crea.
Comunicación
En términos de comunicación, la música puede utilizarse como forma de comunicación no verbal. Para las personas con discapacidad intelectual, que pueden tener dificultades para expresarse verbalmente, la música puede ser una forma de comunicar sus emociones y sentimientos. También es útil para establecer vínculos con los demás cuando se comparten intereses musicales. Puede crear un sentimiento de pertenencia, que a menudo es difícil de conseguir de otras formas para las personas con discapacidad intelectual.
Autoexpresión
La música puede ser una valiosa herramienta de autoexpresión. Cantando, tocando un instrumento o simplemente escuchando música, las personas con dificultades intelectuales pueden expresarse de un modo que les resulta difícil hacerlo verbalmente. Las personas pueden conectar con la emoción de la música y reflejarla o "practicar" emociones a las que pueden tener dificultades para acceder solas.
Memoria
La música puede mejorar el recuerdo, sobre todo en personas mayores con dificultades intelectuales. Esto se debe a que la música puede ayudar a organizar y estructurar la información, facilitando su recuerdo. La música puede ayudar a recordar un acontecimiento favorito, una época del año y, a veces, una persona. Si a tu ser querido con necesidades especiales le cuesta recordar una tarea, prueba a ponerle música.
Movimiento
Por último, la música puede utilizarse como herramienta de movimiento y fisioterapia. Los ritmos y compases de la música pueden ayudar a mejorar la coordinación, el equilibrio, la circulación y la motricidad en general. Muchas personas con necesidades especiales encuentran en la danza una vía de expresión y comunicación. Las coreografías con música son el pasatiempo favorito de muchas personas con discapacidad intelectual, ya que les proporcionan una salida creativa y una sensación de logro.
En general, la música puede ser una herramienta valiosa para las personas con discapacidad intelectual en muchos aspectos de su vida, ya sea para mejorar su estado de ánimo, facilitar la comunicación, fomentar la autoexpresión, potenciar la memoria o mejorar el movimiento.